¡Aprovechemos la energía solar!
La energía solar es, o lo que es lo mismo, la energía que emite el sol, es una colección de radiaciones electromagnéticas, cubriendo un abanico lumínico desde el infrarrojo hasta el ultravioleta.
Afortunadamente el espectro más dañino para nosotros, queda atrapado o reflejado en la atmósfera llegando a la superficie terrestre en forma de luz y calor (principalmente).
En un único día, la energía solar que incide en la tierra equivale a todo un año de la demanda energética mundial… ¡Es la energía de origen renovable más fácil de obtener en todo el planeta!
La energía solar que finalmente llega se la denomina Irradiancia (G) y se mide en vatios por metro cuadrado (W/m2). Ésta es la radiación directa que se puede aprovechar captándola, dirigiéndola y/o concentrándola.
Además tenemos la radiación difusa (la luz en un día nublado) que es consecuencia de los efectos de reflexión/refracción solar y de la que también se puede obtener un cierto rendimiento.
Para conseguir el óptimo aprovechamiento de la radiación solar incidente en cada ubicación se necesita, tanto calcular la orientación/inclinación adecuada de los elementos receptores (los paneles solares de los que se tratará en el próximo punto) como saber con qué irradiancia promedio se puede contar. Para esto segundo se debe usar un atlas de radiación solar.
Uno de los organismos que facilita el de la península Ibérica es la AEMET basado en la observación del satélite meteorológico CM-SAF (Climate Satellite Application Facilities) y corroborado por su propia red radiométrica que está distribuida por el territorio.
Este atlas de irradiancia es un promedio que comprende el periodo 1983-2005.
Los resultados, tanto global como de épocas y meses del año junto con la justificación del procedimiento utilizado, aparecen pormenorizados en un informe.
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¿Todos los paneles solares funcionan igual?
Es verdad que todos los paneles solares se basan en transformar la radiación incidente del sol para aprovecharla, pero son dos de sus propiedades principales las que determinan los tipos principales de paneles solares.
Paneles solares Térmicos
Un panel solar térmico convierte la energía solar en calor.
Es el contenido calórico del espectro lumínico, lo que queda atrapado (efecto invernadero) y usado para calentar un fluido que circula por su interior.
Este fluido suele ser un fluido caloportador, que mediante un elemento de intercambio térmico transmite el calor adquirido al ACS o uso final al que se destine el calor.
Se llama genéricamente captador solar a este tipo de paneles. Aunque también se les conoce como colector solar.
Paneles solares Fotovoltaicos
Un panel solar fotovoltaico convierte la energía solar en electricidad.
Aquí entran en juego los fotones de la radiación solar que excitan un movimiento de los electrones (o lo que es lo mismo, se genera una corriente eléctrica) del silicio presente en estos paneles; de modo que aparece una diferencia de portencial (voltios) entre dos zonas del material: el efecto fotovoltaico.
En esta tecnología es crucial, de cara a su mayor eficiencia, dirigir el panel lo más cercano posible a la perpendicular con el sol en cada momento y lugar.
Es por esto que en algunas instalaciones fotovoltaicas sobre importantes extensiones de terreno (huertos solares) se monten grupos de paneles sobre seguidores solares que imitan, en mayor o menor medida, al girasol.
Paneles solares Híbridos
Como es evidente, este tipo de panel combina en una única carcasa la transformación de la energía solar tanto en electricidad como en calor.
La capa visible cubierta de células fotovoltaicas se encarga de suministrar voltios en corriente continua (Vcc). A la vez, el circuito hidráulico debajo de ellas mientras que las refrigera (lo que hace que tengan mejor rendimiento) atrapa ese calor desprendido por dichas células para calentar el fluido que por él circula y que servirá para producir ACS.
Es una opción a tener en cuenta cuando se pretende ambos tipos de transformación solar y no se dispone de suficiente espacio para dos instalaciones diferenciadas.
En el próximo post analizaremos el rendimiento ACS solar Térmico VS Fotovoltaico. Si no sabes cuáles son los rendimientos de cada uno de los tipos de paneles solares, cómo se calcula o cuál es la mejor elección para producir ACS, ¡Estate atento porque el próximo post aclarará tus dudas!
¿Quieres saber más sobre energía solar térmica y fotovoltaica?
Aquí tienes algunos artículos en los que hablamos sobre ello:
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