Existen diversas razones por las que pueden surgir corrosiones y fugas en los acumuladores ACS (Agua Caliente Sanitaria). Conocerlas nos ahorrará tiempo y la posibilidad de perder dinero por no solucionarlo a tiempo. En otros artículos del blog hemos abordado estas problemáticas. Te invitamos a leer ¿Qué es el pitting producido en las instalaciones de ACS? y Recubrimiento interno: ¿Cómo utilizar este método para la rehabilitación de depósitos de ACS debida a la corrosión?. En este último abordamos un procedimiento comúnmente utilizado para rehabilitar los acumuladores acs y sus “garantías”.
En este artículo, te ayudaremos a saber más sobre este problema demasiado frecuente en los acumuladores acs, y en concreto, lo extrapolaremos al sector turístico y compartiremos contigo un caso real de un proyecto que estamos llevando a cabo en un establecimiento hotelero.
¿Qué características definen los acumuladores ACS en los hoteles?
Hoy en día la mayoría de los hoteles tienen instalaciones de ACS con más de 20 años. En ellas, el mantenimiento y conservación, dado el alto consumo de ACS que las caracteriza, adquiere una gran importancia.
En función de la época de su construcción, los acumuladores pueden ser:
- Galvanizados en caliente
- Revestidos con pinturas epoxi con formulaciones antiguas
- Equipados con revestimientos modernos de gran calidad.
Problemas frecuentes en acumuladores ACS
El punto clave de este sistema son los acumuladores ACS, los cuales suelen sufrir problemas de corrosión interior que en la mayoría de los casos acortan de modo grave su vida útil.
Este efecto que se presenta en los depósitos puede generar una serie de problemas frecuentes:
- Fugas
- Coloración del agua
- Colonias bacterianas
- Disminución de la calidad del servicio
Estos problemas terminan provocando interrupciones del mismo, lo que al final llevará a todo tipo de quejas de clientes internos y externos.
La corrosión es el principal problema que se presenta en los acumuladores ACS. Es un proceso electroquímico que deteriora el metal al reaccionar con el oxígeno presente en el agua o el ambiente.
El proceso de corrosión deteriora el hierro implicando la pérdida de sus características principales como pueden ser la dureza, resistencia o volumen. Esto puede derivar en la destrucción parcial o total del metal.
En las instalaciones ACS de los hoteles se pueden producir desde fracturas hasta filtraciones en tanques, pasando por una menor resistencia mecánica de la maquinaria afectada, mostrando que las pérdidas directas e indirectas pueden ser muy importantes.
La mayor parte de los procesos corrosivos implican reacciones electroquímicas de reducción-oxidación, si bien los tipos de corrosión dependerán de las condiciones del entorno, así como de las características propias del material. La clasificación más habitual es la siguiente:
Corrosión generalizada
También denominada uniforme, se produce de forma homogénea sobre toda la superficie del metal. Provoca un deterioro generalizado que puede derivar en picaduras localizadas, siendo la corrosión más dañina. La parte positiva es que es fácil de prevenir mediante la protección catódica del equipo o los antiguos ánodos de sacrificio.
Corrosión localizada
Es más difícil de detectar, por lo que supone un mayor riesgo que la generalizada. Se presenta en puntos concretos del material, según las condiciones del entorno y la propia geometría de la pieza. Estos son los subtipos:
a) Corrosión galvánica
Se produce cuando hay unión entre metales distintos, ya sea física o eléctrica. El material de menos potencial electroquímico (menos noble) es el que sufre la corrosión. A mayor zona de contacto entre el ánodo y el cátodo, más rápida será la corrosión de la pieza.
b) Corrosión por fisuras
Se presenta en zonas estrechas en las que la concentración de oxígeno es menor, por lo que actúan como un ánodo, provocando así la corrosión.
c) Corrosión por picaduras
También denominada pitting se produce habitualmente en materiales cuyas protecciones han fallado. Al acumularse agentes oxidantes, se deteriora la capa atacada, generándose el proceso corrosivo en zonas localizadas.
d) Corrosión por cavitación
Se presenta en sistemas de transporte de líquidos construidos con materiales pasivados. Variaciones en la presión del sistema provocan flujos con burbujas de aire, que implosionan contra el material. Se deteriora así el material, provocando daños similares, aunque de mayor tamaño, que la corrosión por picaduras. En realidad este efecto en principalmente por erosión, aunque puede integrar corrosiones.
Es muy habitual que los grandes acumuladores de ACS ( Agua Caliente Sanitaria ) sufran ataques de corrosión que originan perforaciones, fugas, coloración del agua, atascos en la red causados por el óxido o los revestimientos despegados, problemas de legionella, entre otros.
Ante un problema de corrosión en un acumulador de agua caliente sanitaria es habitual que los técnicos que tienen que hacerle frente no conozcan todas las soluciones posibles y no dispongan de información suficiente para tomar la mejor decisión.
Los acumuladores de acero, e incluso los inoxidables pueden sufrir problemas serios de corrosión en función del tipo de aleación utilizado, de la técnica de soldadura empleada, del contenido en cloruros del agua, de los productos que se pudieran añadir al agua para desinfectar y de la temperatura de trabajo.
Las medidas tomadas para prevenir la proliferación de la Legionella como los choques térmicos y la desinfección con productos muy enérgicos tienen un papel importante en la degradación o despegue de los revestimientos interiores y en el progreso de la corrosión del acero.
Los choques térmicos a temperaturas que pueden superar los 70ºC y los enérgicos tratamientos de desinfección son factores que incrementan los riesgos de corrosión de los acumuladores, tanto de acero al carbono revestido como de acero inoxidable.
Para que puedas ver más de cerca el progreso de una corrosión en acumuladores ACS, compartimos contigo algunas imágenes y un vídeo del estado en el que estaba el interior de los acumuladores de una instalación ACS de un proyecto que tenemos actualmente en marcha como puede apreciarse en algunas de las fotografías que se incluyen.
¿Qué posibles actuaciones existen cuando el revestimiento interior en acumuladores acs no funciona?
Cuando falla el revestimiento interior suelen aparecer problemas de corrosión que plantean un problema importante, pues el estado interior del acumulador es incompatible con las condiciones exigidas por el RD 865/03. En muchos casos los sistemas estándar de protección catódica, son incapaces de evitar la corrosión del acumulador cuando se producen defectos importantes en la pintura. A continuación, resumimos las posibles actuaciones que se pueden plantear para solucionar este problema:
1. Aplicar un nuevo revestimiento interior, solución temporal que nos garantiza que se repetirá el problema en un plazo de entre 1-2 años
Rehabilitar los acumuladores e instalar un sistema de protección catódica correcto. Sin duda la mejor alternativa para evitar la corrosión interior de los acumuladores es la protección catódica y, en la mayoría de los casos se puede instalar en los acumuladores donde se han iniciado los problemas de corrosión (En sus primeros estados).
El sistema de protección catódica ralentiza los procesos de corrosión, por lo que después de hacer una prueba de presión para garantizar la resistencia mecánica del depósito se procede a realizar unas pequeñas modificaciones en el acumulador, limpiar el interior, aplicar un revestimiento que dependerá del estado y tipo de acumulador e instalar nuestro sistema de protección catódica.
Esta es una solución temporal (de 1 a 2 años) que se realiza teniendo el depósito fuera de servicio entre 24 y 48 horas.
2. Instalar un sistema correcto y eficiente de protección catódica, NO nos garantiza que no se repetirán los problemas de corrosión en los acumuladores
La opción más económica y que visualmente queda mejor es aplicar un nuevo revestimiento interior a base de pinturas epoxi. Esta solución es temporal y no evita que se reproduzcan los problemas de corrosión al cabo de 1 o 2 años, por lo que, a no ser que pensemos solamente en el coste y en el corto plazo no es una alternativa buena, a pesar de que es de las más habituales.
Hay que destacar que para aplicar correctamente un nuevo revestimiento interior es necesario arenar o granallar el acero y aplicar tres capas de pintura, por lo que tenemos el acumulador al menos 3 semanas fuera de servicio.
Si la decisión es reparar el revestimiento interior, invierte en una buena protección catódica.
Si estás cansado de reparar o no es una opción que te de confianza, continúa leyendo hasta el final…. tenemos la mejor solución para no ten tengas que volver a preocupar por estos temas.
3. Sustituir los acumuladores existentes por unos nuevos.
¡CUIDADO!, si no tomamos las medidas de prevención necesarias es muy posible que se repitan los problemas de corrosión
Lo primero que nos pasa por la cabeza cuando tenemos corrosión en los acumuladores de agua caliente de nuestra instalación es sustituirlo por uno nuevo y así acabar con el problema de manera definitiva, pero normalmente los problemas de corrosión se repiten, ya que las condiciones para los nuevos acumuladores son las mismas que para los que han sufrido corrosión.
Una de las alternativas que se plantean muchos técnicos y responsables de mantenimiento es instalar acumuladores de acero inoxidable, pero el comportamiento de cierto tipo de aceros inoxidables frente a la corrosión en aguas con cloruros y altas temperaturas como las de los choques térmicos no hace honor a su nombre.
En muchas ocasiones las salas de máquinas están en lugares inaccesibles, por lo que para sustituir los acumuladores se tienen que hacer obras, tirar paredes o contratar grandes grúas, lo cual dificulta y encarece la adquisición de acumuladores nuevos. Una alternativa con todas las garantías, pero con un coste bastante elevado es sustituir los acumuladores con corrosión por unos nuevos e instalar la protección catódica para evitar que se repitan los problemas de corrosión.
En ciertos casos los acumuladores ACS presentan un estado de corrosión interior inaceptable y no es posible rehabilitarlos. La prevención de la Legionella obliga en muchos casos a la sustitución de los grandes acumuladores de ACS (Agua Caliente Sanitaria) a causa de su corrosión interior.
En caso de sustituir los acumuladores acs por unos equipos nuevos, es fundamental evitar que el problema de corrosión se reproduzca en el nuevo depósito, por lo que el mejor camino es adquirir uno que cumpla la Norma UNE 112076 “Prevención de la corrosión en circuitos de agua”.
En caso de decidir sustituirlos, lo más habitual es que la instalación del nuevo equipo y la retirada del antiguo sea cuanto menos complicada y aparatosa, pues para sacar el antiguo depósito y ubicar el nuevo en su sala de máquinas, puede que existan obstáculos importantes como lo son: las nuevas tuberías, rediseño de la instalación, etc, Frecuentemente los trabajos complementarios que deben realizarse en muchos casos pueden superar el coste del nuevo acumulador.
Si has llegado hasta aquí, significa que has llegado al final de tus problemas de corrosión en los acumuladores. Para solucionar estos inconvenientes en la instalación, tendremos que elegir una alternativa que sea fácil de instalar, con dimensiones más compactas para que, por lo menos, solventemos estos problemas para ubicar el nuevo equipo.
El final de la acumulación de ACS y todos sus problemas.
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¿Has sufrido estas corrosiones en tus acumuladores ACS? ¿Se encuentran los acumuladores ACS de tu hotel o del tipo de instalación colectiva que sea en un estado similar? Cuéntanos en comentarios y, si necesitas asesoramiento, estaremos encantados de que nos cuentes tu caso a través de nuestro formulario de contacto.
FAQs sobre corrosiones en acumuladores acs
¿Por qué son importantes las características de los acumuladores ACS en el sector hotelero?
En el sector hotelero, las instalaciones de ACS suelen tener más de 20 años y requieren un mantenimiento constante debido a su alto consumo. Los acumuladores ACS utilizados en hoteles pueden tener diferentes revestimientos y construcciones, lo que influye en su resistencia a la corrosión.
¿Cuáles son los problemas frecuentes que enfrentan los acumuladores ACS en el sector turístico?
Los acumuladores ACS en hoteles a menudo sufren problemas de corrosión interna, lo que puede llevar a fugas, coloración del agua, crecimiento de bacterias y una disminución en la calidad del servicio. Estos problemas pueden causar interrupciones y quejas de los clientes.
¿Qué es la corrosión y cómo afecta a los acumuladores ACS?
La corrosión es un proceso electroquímico en el que el metal se deteriora al reaccionar con el oxígeno presente en el agua o el ambiente. En los acumuladores ACS, la corrosión puede provocar filtraciones, disminución de resistencia mecánica y otros problemas que afectan su funcionamiento.
¿Cuáles son los tipos de corrosión que pueden afectar a los acumuladores ACS?
Los tipos de corrosión que afectan a los acumuladores ACS incluyen la corrosión generalizada, que afecta toda la superficie del metal de manera homogénea; la corrosión galvánica, que ocurre cuando hay unión entre metales distintos; la corrosión por fisuras y por picaduras, que se presentan en zonas específicas del material; y la corrosión por cavitación, que se produce en sistemas con flujos de líquido y burbujas de aire.
¿Cuáles son las opciones para abordar problemas de corrosión en acumuladores ACS?
Las opciones incluyen aplicar un nuevo revestimiento interior (temporal), rehabilitar y añadir protección catódica (recomendado para prolongar la vida útil), o sustituir los acumuladores por nuevos (debe evitarse la repetición de la corrosión). La solución IHI-800 de Hydronik ofrece una alternativa revolucionaria a la acumulación tradicional.
hola ,necesito presupuesto para reparara 4 depósitos de acs.
estamos ubicados en en sur de Tenerife.
mi numero te movil es 650 39 09 15
Buenas tardes Orlando. Le hemos pasado su consulta al departamento técnico. En breve se pondrán en contacto con usted.